martes, 29 de octubre de 2013

La organización de una boda y los recuerdos


Hoy voy a hablar sobre las bodas, pero sin un tema concreto, sino que voy a hablar sobre consejos genéricos, que a mí me han servido y a muchas novias también les ha gustado cuando he hablado con ellas sobre este tema.

Casi seguro habrás visto que en todas las bodas se hacen regalos, también conocidos como los recuerdos de boda. Es un lindo detalle el hacer regalos, pues demuestra tu estima hacia esa persona. Pero, ¿qué puede decirse de las listas de boda, algo común en varios lugares del mundo? Mediante una tienda de regalos, los novios avisan a sus invitados cuáles son los regalos que les satisfacen. En ocasiones no hay pasta, y los invitados compran regalos humildes, pero los novios en todo caso darán las gracias. A los familiares y amigos se les indica en qué negocio pueden comprar los productos del listado. Pensándolo bien, esta puede ser una idea fabulosa, debido a que hace que los novios decidan regalos que a ellos les satisfacen, y hace que los amigos de los novios tengan la certeza de que van a hacer un buen regalo.

Puede ser espinoso el hecho de tomar decisiones en común. Cuando una persona es soltera no tiene que entrar en consenso con ninguna persona para tomar sus decisiones. Pero estructurar una boda pone a prueba la personalidad, actitud y motivos de ambos: novio y mujer. ¿Cuál es la manera más adecuada de obrar? No hay una manera específica de obrar que sea la idónea. Cada persona lo hará a su manera. Aunque casi invariablemente, la determinación que casi todos los novios toman es partir la labor y cada uno invita a sus propios familiares y amigos. ¿Y qué pasaría si alguien va invitado por parte de ambos lados? Novia y novio lo aman. Y desean que vaya a la boda. Pues la solución es fácil: no habrá problema; puesto que uno y otro desean que vaya, irá.

No deberíamos dar la sensación de que estamos organizando un boda con el propósito de enriquecernos a costa de los demás. Eso sería un hecho muy infame. No pretendas que todos te hagan regalos de mucho valor. Lo importante es que sean sinceros. Quien haga un regalo pensando que puede modificar las decisiones de otras personas, está siendo perverso e inconsciente. Deseando gran ventura, todos los asistentes dan regalos a los novios, efectuando una obra caritativa. Pero, ¿se vería bien que los recién casados proclamaran delante de los presentes quién les ha hecho cada regalo? Lo más lógico es que cada invitado se guarde en secreto qué regalo hizo a los novios, a no ser que quiera confesarlo a sus más allegados e íntimos amigos. ¿Sería desaconsejado decir a quién pertenece cada recuerdo, cada regalito? Mi opinión es que sí, porque no todos han llevado regalo, debido a situaciones muy variadas.

Quizás lo más normal es mandar las invitaciones con un par de meses de adelanto, o un mes como mucho. Son muchos preparativos los que hay que hacer para asistir a la boda: transporte, dinero, tiempo, vestimenta y muchos otros factores. Porque una invitación es algo que te da la opción de aceptar o rehusar asistir a ese evento. Hay quien ve las invitaciones como multas de circulación. En cualquier caso, nadie te obliga a que vayas. Pero por motivos monetarios o de empleo, no está mal visto rechazar una invitación. Estamos en crisis y eso se comprende sin problema. Nadie está a salvo.

Sé de ciertas parejas de novios que no celebraron baile en su boda. Obviamente, no todo el mundo está de acuerdo, y eso produce la ira. ¿Se podría incluso acortar la cantidad de baile que se ha previsto? Sí. Aunque puedes cambiar de idea y aumentar o abreviar el baile. El novio, por encima de la novia, es el máximo responsable de todo lo que ocurra. Respecto a las bebidas con alcohol, algunas parejas deciden no dar bebidas alcohólicas en el banquete, pues su abuso podría echar a perder la alegría de la ocasión. Limitación de cantidad de copas y limitación de intervalo pueden ser algunas sugerencias que algunos novios han puesto en práctica. Los borrachos deberían estar en un rincón para no incordiar a los otros invitados. Pero como eso sería anti-social, mejor es que no se de pie a ese punto.

Espero que estos breves consejos te sirvan para que tu boda sea un verdadero éxito, que es lo que todas deseamos y así guardes un bonito recuerdo para toda la vida, tanto tú como tus invitados.
Besos.